John va a la tienda de delicatessen a comprar sopa.
Una vez sentado y a punto de comer, llama al camarero.
Cuando llega el camarero, dice: “Prueba esta sopa”.
El camarero dice: “¿Por qué qué le pasa a la sopa?”
John dice: “Prueba esta sopa”.
El camarero dice: “John, has venido aquí durante treinta años y siempre te piden sopa, nunca antes te habías quejado”.
John dice: “Prueba esta sopa”.
El camarero dice: “¿Qué? ¿Qué es? Si no quieres la sopa de pollo, tenemos otros tipos de vegetales, ¿Minestrone italiano?
John dice: “¡Prueba esta sopa!”
El camarero finalmente acepta: “¡Bien, John, bien! Probaré la sopa”.
Se inclina sobre la mesa preparada para probar la sopa, duda y dice: “¿Dónde está tu cuchara?”.
“Exactamente”, dice John, “¿Dónde está mi maldita cuchara?”