Un culturista se quita la camiseta y empieza a hacer flexiones delante de una mujer rubia.
Ella exclama “¡Guau, qué gran pecho tienes!”
Él dice: “Dinamita sólida, cariño”.
Luego se quita los pantalones y la rubia dice: “¡Vaya, qué pantorrillas tan enormes tienes!”.
Flexiona los músculos de sus piernas y dice: “Como dije, pura dinamita, cariño”.
Luego se quita la ropa interior y el rubio sale corriendo y gritando de miedo.
Se viste y sale a perseguir a la mujer.
Cuando la alcanza, le pregunta: “¿Por qué diablos saliste corriendo así?”.
Ella responde: “Tenía miedo de estar cerca de toda esa dinamita cuando vi lo corta que era la mecha”.